lunes, julio 18, 2005

Cerrado por vacaciones

Para que los clientes del quiosco puedan irse tranquilos de vacaciones, sin el pesar de qué estará pasando con sus diarios y coleccionables, cerramos la paradilla y nos vamos a la playa. Esperemos que el tapeo, las cervecillas y el embotamiento sensorial producido por la exposición excesiva a las canciones del verano nos permitan volver con las fuerzas recuperadas.

Entre trago y trago intentaremos ponernos al día con las anecdotillas que no nos ha dado tiempo a escribir. Y nos acordaremos de tooooooodos los que desde las seis y pico de la mañana nos venis a visitar pidiendo vuestra ración de cultura estampada en papel, pegada a un cartón y complementada con regalos inútiles.

Dejad vuestras reservas apuntadas, y hasta el 22 de agosto. Felices vacaciones!

martes, julio 12, 2005

Pido perdón. Elvis es el Rey

Cuando uno mete la pata, hay que reconocerlo y hoy he cometido una desconsideración enorme. Pero como rectificar es de haberse equivocado y tras dos meses y medio en el quiosco a uno se le empieza a pegar la sabiduría de la calle, ahí va mi sentido mea culpa. Explico los hechos.

Tras los incidentes de la mañana y una copiosa comida en Chez Eduardo, la tarde pintaba bien. Acababa de colocar un paquete compuesto por Mia, Integral y un Clara con kit de chanclas y bolsa (el últimooooooé), y una señora que hace unos días encargó una película atrasada (de esas que nunca vuelven y te dejan colgado con un bodrio incolocable) había roto las estadísticas viniendo a buscar su encargo y pagando a tocateja. Entre una y otra, 20 euritos del tirón. Menuda racha...

En ese momento de autocontemplación aparece un señor de color negro (afroafricano, supongo mientras lo miro rebuscar dentro de un sobre enorme del que cae una reluciente moneda) que agarra un Avui y me suelta un Euro acompañado de una enorme sonrisa. Se lo agradezco con otra no menos enorme y me parece entender un zankius que me hace pensar que tal vez no sea afroafricano sino afroamericano.

Le lanzo un gudbai y veo que duda. ¿Lo habré pronunciado mal? Parece que quiere comunicarse y me pongo en posición "atiendeguiris": todos los sentidos alerta y las manos despejadas por si tengo que hacerme entender en el internacional lenguaje de los signos. Empiezo a dudar que sea americano cuando me doy cuenta que estoy entendiendo lo que me dice. Me señala la foto de portada y me pregunta qué le ocurre a esa mujer. Se trata de la afroinglesa que tras el 7J busca a su hijo desaparecido. Le explico que está lukin for her son y él dice algo de londoón a lo que respondo con un contundente yesyes. Entonces me dice que su hijo está estudiando español y le ha pedido que le lleve un periódico en espanis. "Pos l'has cagao", pienso mientras le explico que aquí tenemos dos lenguas (de idiomas, se entiende) y que ha ido a pillar uno en catalán por lo que su hijo no va a entender ni papa y va a pillar una depresión del carajo, despedir a su profesor y cambiarse al francés, Dios no lo permita. A continuación hago un repaso visual a todos los periódicos y mientras señalo voy indicándole espanis, espanis, cátalan, espanis, cátalan... Noto que no acaba de entender qué diferencia hay entre El Periódico azul y el colorao. Finalmente se decide por La Vanguardia y me pregunta si también vale un dólar. No hace falta que le diga nada. Él mismo rectifica y cambia dólar por yuro. Entonces, no sé si para practicar un poco más o haciendo caso al Alcalde que nos pide que seamos majetes con los guiris, le pregunto que de dónde es. "Yunited esteits", me dice. "Ya -pienso- pero de dónde, joer". Memfis.

En ese momento se apoderan de mi los espíritus de los negociantes del mercadillo de Marrakech, que cuando te oyen hablar español empiezan a gritar ¡Pantoja, Raul, Ronaldinho! y le suelto: "Pau Gasol". El daño ya estaba hecho.

Me mira con una sonrisa compasiva y me dice: "Elvis"

Encajo la puya y asiento. Tienes toda la razón, le digo con la mirada mientras me observa como un padre que reprende divertido a un niño de cuatro años que acaba de cometer una travesurilla. Avergonzado, lo veo marcharse con La Vanguardia bajo el brazo mientras, creo, piensa lo mal que está el mundo, cómo nuestro sistema de valores se desmorona mientras derrocamos a los dioses de toda la vida para sustituirlos por ídolos pasajeros. Cuánta razón tiene el joío.

Y mientras hago firme promesa de ser menos cateto y guardarle el merecido respeto a nuestros mayores, observo el brillante yuro al que le he dedicado 10 minutos y una vergüenza de por vida, antes de echarlo en el bote. Al Rey lo que es del Rey, y al quiosquero lo del quiosquero.

Elvis.com The Official Site

Web oficial de Pau Gasol

¡Bomba!

Menudo susto...

Serían las ocho y media de la mañana. Lo teníamos todo montado y el Quiosquero se iba a tomar un café y hacer aguas menores (como cada mañana justo antes de que yo me largue a mis otras labores) cuando se ha oído un petardazo considerable. No es que uno esté histérico perdido después de lo de Londres, pero digamos que ya se nos habían relajado los oídos después de tanto San Juan y tanto San Pedro y tanto hijodesumadre tirando petarditos, y me ha sorprendido el estruendo. He esperado unos segundos y, como no se han oído correrías, ni gritos, ni sirenas, y todo el mundo ha seguido a su rollo comprando La Vanguardia y el paquete de Ducados de rigor..., pues he seguido a lo mío. Será algún graciosete que ha descubierto la caja de truenos que perdió en la verbena cuando ya estaba borracho.

Pues resulta que era una bonba, ¡y a unos 500 metros del quiosco!

A media mañana ha pasado un policía a preguntar si habíamos visto algo sospechoso. Nos ha dicho que han puesto una bomba frente al Instituto Italiano de Cultura. Alguien ha visto el paquete, ha avisado a la policía y el cachivache a explosionado (¿se dice asín?) hiriendo a un artificiero y llevándose por delante a un pobre perro que no tenía ninguna culpa. Ahora leo que ha sido un grupo de anarquistas en protesta por la detención de unos camaradas.

Como barcelonés (ciudad de anarquistas) y nieto de anarquista (tú sí sabías, yayo), me siento acreditado para decir: ¡idos a la mierda! (también se dice asín). Primero porque no se ponen bombas. Segundo porque no se ponen bombas donde puedan hacer daño a inocentes. Tercero porque no se ponen bombas que hagan daño a nadie (incluido el pobre chucho). Cuarto porque no se ponen bombas en mi ciudad. Y quinto y muy importante porque no se ponen bombas cerca de donde yo paso casi cada día, joder.

Mientras espero a leer algo sobre el tema mañana tempranito en los periódicos, os dejo el enlace a un blog de una vecina tan cabreada como yo.

Un mundo en que quepan muchos mundos: Bombazo ¿controlado? en el centro de Barcelona

Esclata una 'cafetera bomba' enfront de l'Institut Italià de Cultura de Barcelona - Vilaweb (Europa Press)

Barcellona, bomba al Centro italiano. Artificiere ferito nello scoppio - La Repubblica