sábado, septiembre 13, 2014

Tu quiosquero lo sabe TODO

Una de las cosas que más gracia me hace del quiosco es que hay mucha gente que, viéndonos rodeados de información, dan por hecho que lo sabemos todo. Del mismo modo que cuando vamos a un restaurante le preguntamos al camarero si tal plato lleva patatas fritas o si tal otro es más o menos grande, los clientes a menudo nos preguntan por los contenidos de cualquier publicación que recibimos, como si nos las supiéramos todas de memoria.
Es habitual que alguien te pregunte si el Hola de esta semana habla de la boda de fulanito, o qué periódico trae más información sobre el debate del estado de la nación o si tenemos alguna revista que hable de las playas de Mallorca, pero las del norte, no las del sur.
Cualquiera que haya pasado por delante de un quiosco se habrá dado cuenta de que hay unas 500 publicaciones distintas, que se renuevan periódicamente. Es evidente que nadie puede leérselas todas, y menos aún aprendérselas. Pero a la gente le gusta pensar que lo que le interesa es fundamental para todo el mundo y, si él está dispuesto a pagar dos o tres euros por leer algo, cómo no va a leerlo también alguien que lo tiene ahí al lado, al alcance de la mano, y gratis.
Debo reconocer que mis intereses son muy diversos y muchas veces hojeo las revistas más variadas cuando no pasan clientes. Pero de ahí a tener en la cabeza un índice de todas las publicaciones hay un abismo. En cualquier caso, cuando alguien me pregunta mantengo la ilusión e intento responder en función de lo que he ido aprendiendo sobre una revista a base de sacarla y meterla de los paquetes durante tantos años. Y si la pregunta es demasiado concreta les respondo con cara de pena que me acaba de llegar y aún no he tenido tiempo de leerla pero que le eche un vistazo si quiere.
En cualquier caso, lo de esta mañana no me había pasado nunca. Aún no eran las nueve cuando aparece un señor que no es cliente habitual y se me queda mirando, con esa cara de "tengo una duda pero no sé si tú me la puedes resolver". Cuando se decide me pregunta: "¿Sabes qué periódico publica mañana el reportaje?"
Mi cara ha debido ser un poema. Antes de preguntarle a qué se refería me lo ha aclarado, para evitar dudas. "Sí, el reportaje sobre eso".
Haber empezado por ahí, hombre. Reportajes publican todos, pero sobre eso sólo escribe un periódico. Concretamente uno. Ése. Y no los otros.
Como ha visto que soy un poco corto ha decidido hablarme despacito para que lo entendiera. Mañana sale un reportaje. En un periódico. Probablemente, me ha aclarado, en El Periódico. Pero quería que yo se lo confirmase.Si era mañana o no. Cuando sale. El reportaje. Ya sabes. Sobre eso. Lo de la diada.
Aaaaahora. Eso es la diada, sobre lo que ha habido reportajes toda la semana y, seguramente, también mañana. Y la próxima. Me ha parecido que intentar explicarle que los medios no nos mandan una planilla con todo lo que tienen previsto para el día siguiente iba a ser demasiada información así que le he dicho que no lo sabía, pero que probablemente. No se ha quedado muy convencido. No creo que vuelva mañana pero si lo hace le tendré preparado un paquete con todos los periódicos que traigan un reportaje de eso.Aunque seguro que me preguntará quién publica sobre lo otro y entonces sí que la habremos liado.

miércoles, septiembre 10, 2014

Mejora adecuadamente


Dice la Constitución que “todos los españoles son iguales ante la ley”; dicen los partidos políticos que “todos los españoles son iguales, con los mismos derechos y obligaciones”; y dicen las distribuidoras (artículo 21, apartado 2b, de la ley de régimen unidireccional de sometimiento) que “todos los quiosqueros son iguales en cuanto a deberes para con ellas y viceversa en cuanto a derechos”. De ahí se deduce que las distribuidoras tienen la obligación de porculizar a los quiosqueros por igual, procurando no destacar las unas sobre las otras.

Viene esto a cuento por el nuevo decreto ley que ha aprobado Logística de Miedos referente a la recogida de devoluciones: desde hace algún tiempo, la susodicha distribuidora sólo recoge 2 (dos) veces en semana (lunes y viernes), seguramente por no tratar a sus “colaboradores” de forma discriminada respecto a otras distribuidoras como SADE o SGEL. Sin embargo, para no diferenciarse de MARINA BCN, mantiene el mismo nivel de facturación de SERVICIOS AUXILIARES (PORTES), es decir, cobra 7 portes completos en lugar de los 2 portes completos y 5 medios que, en realidad, hace. No me he fijado si la mejora repercute en el precio del servicio. Perdón.

Poco a poco vamos consiguiendo aumentar la productividad: hace 8 años un quiosquero tenía 5 distribuidores (2 a jornada completa y 3 a jornada reducida) y pagaba 5 portes; ahora, este mismo quiosco tiene 2 distribuidores (1 a jornada completa y 1 a jornada reducida) y paga 5 portes. Si esto no es mejorar la productividad que venga Van Rompuy y lo vea.

martes, septiembre 09, 2014

Regreso al futuro

Después de 4 años, 5 meses y 9 días aterrizo por el quiosco; durante las vacaciones de verano se han introducido profundas modificaciones en la cadena de montaje y me han pedido asesoramiento informático durante el tiempo que necesite el nuevo equipo para engrasarse.
En 4 años se olvidan muchas cosas y esperaba encontrarme más despistado que un gato en una matanza. No ha habido tal; la profesión de quiosquero imprime carácter y no he tenido demasiados problemas en recordar cómo se entra un albarán, se realiza una venta o se prepara una devolución (siempre desde el punto de vista del usuario del TPV). La verdad es que, en líneas generales, todo funciona igual que cuando me licencié, por más que las distribuidoras se empeñen en arreglar la vida de los vendedores. No hay ninguna que no haya modificado, por lo menos, el albarán de entrada.
Miento. Logística no ha tocado ni una sola coma de sus documentos de trabajo: ya eran lo bastante horribles y enrevesados como para perder el tiempo en desmejorarlos. Y eso en el caso de que puedan empeorar, lo cual es harto complicado. Las otras tres distribuidoras han variado el albarán, que adquiere con el nuevo diseño una facilidad de interpretación encomiable, y, ahí es nada, la factura. En la próxima modificación vendrán cuadradas de serie.

Con el permiso de Quiosquera y si la salud o las ganas no lo impiden, vamos a analizar en profundidad los documentos con los que intercambiamos información con las distribuidoras. Puede ser divertido.

Nota: Puede parecer que cuando escribo lo hago “ex catedra”; aseguro que soy consciente de mi falibilidad y que de ningún modo quiero establecer patrones, porque lo que es válido para mí no tiene por qué serlo para ningún otro. Cuento mi parecer y explico lo que me facilitaría la vida. Seguramente, a la mayoría de quiosqueros les van bien los documentos con los que trabajan, ya que, de no ser así, habrían protestado y alguien hubiera tenido en cuenta sus protestas y mejorado el sistema.
A mí el sistema no me gusta.