jueves, febrero 10, 2011

Si medio funciona, ¡no lo arregles!

Pronto hará un año que el Ministerio de Trabajo e Inmigración me declaró inútil total; pronto hará un mes que el Juzgado de lo Social me declaró inútil absoluto que, aunque parezca lo mismo, no es igual. Es como en las temperaturas: a cero grados Celsius, hace un frío que te pelas; a cero grados Kelvin, es decir, a cero grados absolutos, hace tanto frío que ya ni se nota. Pues eso, que estoy incapacitado para cualquier trabajo físico o mental (del trabajo intelectual no se habla; ya estaba incapacitado antes) y, sabiéndolo, los vendedores de prensa todavía me exigen que esté al tanto y no me echan una mano. ¡Hombre, si SADIBARNA cambia el sistema de albaranes y facturación, sólo pido que me avisen para que pueda estudiar las modificaciones y contar después cómo afectan! Pues no. Tuvieron que llegar los Ángeles de Dalry, asustadas, a meterme el miedo en el cuerpo.
- ¡Quiosquero, que no sabemos cuadrar las facturas! ¡Quiosquero, que parece que nos cobran dos veces el mismo albarán!

Me ha llevado toda una tarde averiguar cómo funciona la nueva facturación, y eso porque tengo instalado Kiosnet, hijo del mismo padre que parió (bueno, eso fue la madre) el sistema informático del Grupo Logista. ¡Lástima me dan quienes hayan tenido que cuadrar a güevo!

Desmenucemos la cuestión.
He aquí un albarán actual de SADIBARNA, es decir, un albarán que incorpora las “mejoras” que se han implementado en 2011.

Este albarán es, aparentemente, idéntico a otro cualquiera de 2010. ¡Error! Hay dos pequeñas diferencias que mostramos a continuación:

1.- En el cuerpo del albarán, aparecen líneas que, en su columna “importe”, presentan un pequeño jeroglífico: APZ 12/02/2011, que leído de forma lineal suena así A PEZETA DOCE DOS DOS MIL ONCE. No quiere eso decir que el albarán nos lo vayan a cobrar en peZetas, no; quiere decir que estas líneas quedan aplazadas hasta la factura de 12 de febrero de 2011. Y cada línea con jeroglífico puede apuntar a una fecha diferente.


2.- En el ángulo inferior derecho del albarán, podemos observar la fecha de entrega, la fecha de facturación y el importe del albarán. En el ejemplo que nos ocupa, se trata de un albarán que se recibió el 31 de enero, que será facturado el 5 de febrero y cuyo importe total asciende a 60,96€.

¡Error!

Hasta el 31 de diciembre de 2010 era así. Cada albarán tenía un valor que se facturaba en un único vencimiento. SADIBARNA ha descubierto la sopa de ajo; se ha dado cuenta que si los quiosqueros devolvían el género antes de la fecha de vencimiento, la distribuidora pagaba publicaciones que todavía no había cobrado, con la consiguiente pérdida de intereses bancarios (para ellos, que es a lo que están acostumbrados, un güevo; para nosotros, una miseria y un riesgo). La solución estaba cantada: aplazar el pago de las publicaciones devueltas antes de ser facturadas. Es lo que hacen, por ejemplo, SGEL y MARINA BCN, aunque con métodos y resultados diferentes. Mientras SGEL mata cada semana las publicaciones entregadas y devueltas (luego cobrará o pagará cada una según marque su vencimiento), MARINA BCN sólo factura los albaranes que vencen en la semana y paga las devoluciones de las publicaciones que ya haya cobrado; no hay problema con los albaranes de entrega, aunque más de una devolución acabe en el departamento de objetos perdidos.
SADIBARNA ha rizado el rizo e implementa el sistema APZ para entregas y devoluciones. Es decir que un albarán de entrega se pagará en uno o varios plazos y, donde dice “fecha de vencimiento”, quiere decir “fecha del primer plazo”; y donde dice “importe total”, quiere decir “importe del primer plazo”. Ahí está el truco. Cuando recibamos la factura del 5 de febrero, vendrá incluido el albarán de la muestra con un valor de 60,96€, pero seguiremos debiendo 33,35€ que corresponde a las publicaciones aplazadas y que se facturarán el 12 de febrero. ¿Cómo puede usted saber el importe total del albarán? Fácil, eche mano a la calculadora.

Me pregunto si será legal emitir un albarán en tales condiciones, un albarán que puede inducir a engaño al cliente que lo recibe.

Respecto a las devoluciones, se sigue idéntico sistema: usted, quiosquero, envía unas publicaciones en devolución y en la próxima factura encontrará una serie de líneas con el ya consabido APZ. Si usted se limita a puntear las cantidades como ha hecho hasta ahora… ¡error! Las líneas APZ no están sumadas en el total y, por tanto, debe conservar los albaranes para comprobar que se las pagan en la factura que se emita en la misma fecha que acompaña al APZ.

¿Cómo se facturan los aplazados?

En la hoja donde se imprimen los albaranes facturados (REP0000000 y COM0000000), aparece un nuevo tipo: el APZ0000000. Este albarán es el sumatorio de todas las líneas de entrega aplazadas y todas las devoluciones igualmente aplazadas.

El detalle de tales líneas se sirve en una o dos hojas que van al final de la factura.

¿Qué no os habéis enterado? Yo tampoco, pero va así. Mientras encuentro en tiempo necesario para describir el método de seguimiento, marcad en los albaranes de entrega o devolución cada una de las líneas facturadas y guardad el albarán hasta que estén tachadas todas las publicaciones. O apuntad en una libreta las líneas aplazadas y comprobad que os las facturan.
Para quienes usan Kiosnet, una aclaración: los albaranes electrónicos descargados llevan señaladas las líneas con aplazamiento pero no actualizan el archivo de líneas pendientes. Hay que entrar en el albarán y hacer una falsa modificación de cada línea para que después se puedan incorporar al albarán APZ. El programa no permite traspasar a pendientes las líneas de devolución que estén aplazadas.

¡Isidrooo! ¡Échame una mano, primo!

(Estoy trabajando con una copia casera de Kiosnet, es decir, antigua, y quizá Cyberpoint haya resuelto la problemática a la vez que la creaba. Quizá.)

3 Comments:

At 10/2/11 20:14, Blogger kioskero said...

Como sabes que yo soy muy tradicional (y para algunas cosas mucho mas)utilizo rotuladores de colores con los que marco las lineas pendientes tanto de cobro como de abono. Con ello me es mas facil localizarlas a golpe de vista al revisar las facturas.
Este mismo sistema de facturación/abono ya lo llevamos utilizando por estos lares bastante tiempo.
¿Tan dificil es emitir un documento seriado para cada una de las cosas( entregas , aplazados y abonos).

 
At 22/2/11 01:03, Blogger BANDOLERA said...

Está claro, quiosquero... A quien hay que cuadrar ¡Es al güevo!!
Ya sabes, eso de la cuadratura del círculo, aunque el güevo no sea circular, no importa... Se parece, que es curvo.
¡Y andandooooo!!! Así funcionan...

 
At 22/2/11 23:18, Blogger Quiosquero said...

Bandolera: es más fácil cubicar un güevo (a martillazos) que cuadrar una factura de nuestro muy amados proveedores.
Kioskero: Hoy trataba de explicar a uno de los Ángeles de Dalry cómo cuadrar las facturas de SADE y he acabado haciendo una exposición del cuadre "analógico" que tú empleas. Creo que me ha entendido.

 

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