martes, febrero 22, 2011

¿Analógico o digital? Informatícese

Hemos profundizado un poco más en la factura de SADE (Logista) y comprobado lo que ya suponíamos: es una herramienta pensada casi exclusivamente para facilitar la vida del vendedor de prensa y revistas.
Antes de implementar el nuevo protocolo, el sistema de cuadre manual era sencillito y se reducía a unos pocos controles que explicamos.

Cuadre analógico antiguo
1.-
Control de albaranes de entrega: Puntear los albaranes cuyo vencimiento coincida, o casi (albaranes formato COM), con la fecha de emisión de la factura. Tachar tales albaranes para saber que ya están facturados y que no deberán aparecer en ninguna otra factura.
2.- Control de devoluciones: Se presentan varios casos.
2a) Devoluciones de género reciente requerido por el proveedor: Tachar las líneas de la primera parte de la hoja de devolución que estén en la factura.
2b) Devoluciones de género atrasado requerido por el proveedor: Tachar las líneas de la segunda parte de la hoja de devolución que estén en la factura.
2c) Devoluciones de género no solicitado por el proveedor: Comprobar que las líneas añadidas manualmente en la hoja de devolución estén facturadas y tacharlas.
2d) Comprobar si hay devolución de publicaciones reclamadas y tacharlas en la correspondiente hoja de devolución.
3.- Gestión de reclamaciones: Ver qué líneas de la devolución no están en blanco y reclamar su abono. Revisar reclamaciones anteriores y tachar las líneas que vengan facturadas.
4.- Quemar (o archivar) los albaranes de entrega facturados y los albaranes de devolución totalmente tachados.

Cuadre analógico contemporáneo.
El nuevo método requiere un poco de paciencia y tranquilidad, virtudes, ambas, de las que los quiosqueros andan sobrados. Básicamente se mantienen los controles:
1.- Control de albaranes de entrega: Puntear los albaranes cuyo vencimiento coincida, o casi (albaranes formato COM), con la fecha de emisión de la factura. Tachar en tales albaranes las líneas que tengan números en la columna “importe” para saber que ya están facturadas y que no deberán aparecer en ninguna otra factura. Deben quedar sin tachadura las líneas que en la columna “importe” tengan las letras APZ seguidas de una fecha.
1’.- Control del albarán de aplazados: El nuevo modelo de factura viene seguido de una hoja adicional donde se relacionan las publicaciones aplazadas, ya sean derivadas de un albarán de entrega, ya sean derivadas de un albarán de devolución. Este albarán, con número de referencia APZXXX (XXX, aproximadamente, número de semana) es una relación de las líneas aplazadas en los albaranes REP. La referencia del albarán original se encuentra a la izquierda, en la columna “documento”; en el original de dicho albarán, las líneas de los productos aplazados deberán estar sin tachar. Tachar ahora. No es frecuente, pero podría darse el caso que estas líneas aplazadas correspondan a un albarán que aún no ha sido facturado; se trataría de un albarán cuya fecha de vencimiento fuese, por ejemplo, el 19/02/2011 y que alguna de sus líneas se aplazase hacia atrás, es decir, líneas que se cobren el 12/02/2011. Esto es lo que se entiende por facturación retroactiva.
En el mismo albarán de aplazados, se relacionan las líneas de los albaranes de devolución que no se abonaron en la semana en que se envió la devolución; estas líneas se distinguen por llevar la referencia DEVXXX (XXX no sé lo que significa). Buscar las devoluciones anteriores y localizar estas publicaciones que, seguro, estarán sin tachar. Tachar ahora.
2.- Control de devoluciones: Los apartados 2a), 2b), 2c) y 2d) del apartado “cuadre analógico antiguo” permanecen inalterables; sólo debe tenerse en cuenta que algunas líneas de la devolución, en su columna “total”, mostrarán las letras APZ seguidas de una fecha. Esto significa que la publicación no se abonará hasta la fecha en cuestión. No he encontrado ninguna fecha que sea anterior a la fecha de factura (devolución retroactiva) pero mejor no fiarse. Sí puede pasar, y pasa, que una línea de la devolución se aplace hasta la emisión de la presente factura. Me explico; puede ser que en la factura del día 22/01/2011, por poner un ejemplo, aparezca una línea de devolución cuyo abono se aplace hasta el día 22/01/2011; seguro que esta línea está en el albarán de aplazados de esta misma semana. Esta técnica se conoce como devolución paradójica, que parece como si se devolviera dos veces pero sólo se abona una. Es como la canción:

Aunque me voy no me voy,
Aunque me voy no me ausento…
(estoy en el albarán cosido al final de la factura).

Lo normal, de todos modos, es que las líneas aplazadas no se abonen hasta la semana siguiente o posteriores, en cuyo caso no deben tacharse.
3.- Gestión de reclamaciones: Ver qué líneas de la devolución no están en blanco ni aplazadas y reclamar su abono. Revisar reclamaciones anteriores y tachar las líneas que vengan facturadas.
4.- Quemar (o archivar) los albaranes de entrega y los albaranes de devolución que estén totalmente tachados.

Cuadre digital
Quienes tengan instalado KIOSNET ya pueden tirarlo y pasarse al cuadre manual, o reclamar a su proveedor la resolución de las siguientes carencias:
1.- Recepción de albaranes de entrega. Los albaranes de entrega con líneas aplazadas están aplazados pero no (aplazamiento paradójico). Si visualizamos un albarán recibido de esta guisa, observamos un chorro de cosas importantes:
1a) El importe del albarán es la suma de los importes de las líneas no aplazadas.
1b) Las líneas aplazadas muestran un , en rojo, en la columna que juega de extremo izquierdo. No se trata de un manifiesto político; este quiere decir que la línea está aplazada y que se puede incluir en otro albarán mediante el botón “traer aplazado”.
1c) Cuando introducimos el albarán de aplazados que acompaña a una factura, APZXXX, el albarán debería contener las devoluciones aplazadas en facturas anteriores (ya diremos cómo han entrado) y que vencen este día. Al seleccionar la función “traer aplazados”, la pantalla no muestra ningún aplazado. Fallo 1: el aplazado invisible.
El programa que recibe los datos electrónicos ignora en parte los aplazamientos y no los guarda en el oportuno archivo. Tiene solución; váyase al albarán de entrega, sitúe el cursor consecutivamente sobre cada una de las líneas que tienen , pulse una vez la opción “aplazado” (desaparece el ) y vuelva a pulsar la opción “aplazado” (aparece el ). A partir de ahora, la línea estará disponible al pulsar “traer aplazados”.
1d) Si, una vez traída la línea aplazada, se borra el albarán original, se descuentan del stock las unidades anuladas; si se borra el albarán de aplazados, también se descuentan del stock las unidades anuladas. Fallo 2: en busca del stock perdido.
1e) Cada vez que vayamos al albarán de entrega original y hagamos la operación “aplazado”-“aplazado”, añadimos un nuevo registro al archivo de aplazados que se descontarán del stock al anularse. Fallo 3: adición en cadena.
1f) Si anulamos el albarán original mientras los aplazados están en tránsito, se rebaja el stock de las líneas aplazadas pero éstas quedan disponibles para asignar a otro albarán de aplazados. Si anulamos la línea, se vuelve a descontar del stock. Fallo 4: aparecido en combate.
1g) No he hecho más pruebas.
2.- Albaranes de devolución aplazados: Si queremos cuadrar las facturas digitalmente, no debemos perder la pista a las devoluciones aplazadas; para ello, lo más sencillo es crear un albarán de entrega en negativo por cada fecha de aplazamiento, donde se registren todas las líneas aplazadas para esta fecha.

Hay un detalle importante: el programa de entrada de devoluciones tiene activo el botón “traer aplazado” pero no está programada la forma de aplazar las devoluciones; quedaría muy bien que se pudiera. Y ya sería la releche si, al “traer aplazados”, se pudieran seleccionar y traerlos todos de golpe.
Mientras tanto, lo dicho: el lapicillo encima de la oreja y a aplicar el método analógico.


Nota.-
No todo han de ser críticas a nuestros proveedores. Logística de Medios también ha rehecho su factura y ¡POR FIN! añade la lista de publicaciones aplazadas

jueves, febrero 10, 2011

Si medio funciona, ¡no lo arregles!

Pronto hará un año que el Ministerio de Trabajo e Inmigración me declaró inútil total; pronto hará un mes que el Juzgado de lo Social me declaró inútil absoluto que, aunque parezca lo mismo, no es igual. Es como en las temperaturas: a cero grados Celsius, hace un frío que te pelas; a cero grados Kelvin, es decir, a cero grados absolutos, hace tanto frío que ya ni se nota. Pues eso, que estoy incapacitado para cualquier trabajo físico o mental (del trabajo intelectual no se habla; ya estaba incapacitado antes) y, sabiéndolo, los vendedores de prensa todavía me exigen que esté al tanto y no me echan una mano. ¡Hombre, si SADIBARNA cambia el sistema de albaranes y facturación, sólo pido que me avisen para que pueda estudiar las modificaciones y contar después cómo afectan! Pues no. Tuvieron que llegar los Ángeles de Dalry, asustadas, a meterme el miedo en el cuerpo.
- ¡Quiosquero, que no sabemos cuadrar las facturas! ¡Quiosquero, que parece que nos cobran dos veces el mismo albarán!

Me ha llevado toda una tarde averiguar cómo funciona la nueva facturación, y eso porque tengo instalado Kiosnet, hijo del mismo padre que parió (bueno, eso fue la madre) el sistema informático del Grupo Logista. ¡Lástima me dan quienes hayan tenido que cuadrar a güevo!

Desmenucemos la cuestión.
He aquí un albarán actual de SADIBARNA, es decir, un albarán que incorpora las “mejoras” que se han implementado en 2011.

Este albarán es, aparentemente, idéntico a otro cualquiera de 2010. ¡Error! Hay dos pequeñas diferencias que mostramos a continuación:

1.- En el cuerpo del albarán, aparecen líneas que, en su columna “importe”, presentan un pequeño jeroglífico: APZ 12/02/2011, que leído de forma lineal suena así A PEZETA DOCE DOS DOS MIL ONCE. No quiere eso decir que el albarán nos lo vayan a cobrar en peZetas, no; quiere decir que estas líneas quedan aplazadas hasta la factura de 12 de febrero de 2011. Y cada línea con jeroglífico puede apuntar a una fecha diferente.


2.- En el ángulo inferior derecho del albarán, podemos observar la fecha de entrega, la fecha de facturación y el importe del albarán. En el ejemplo que nos ocupa, se trata de un albarán que se recibió el 31 de enero, que será facturado el 5 de febrero y cuyo importe total asciende a 60,96€.

¡Error!

Hasta el 31 de diciembre de 2010 era así. Cada albarán tenía un valor que se facturaba en un único vencimiento. SADIBARNA ha descubierto la sopa de ajo; se ha dado cuenta que si los quiosqueros devolvían el género antes de la fecha de vencimiento, la distribuidora pagaba publicaciones que todavía no había cobrado, con la consiguiente pérdida de intereses bancarios (para ellos, que es a lo que están acostumbrados, un güevo; para nosotros, una miseria y un riesgo). La solución estaba cantada: aplazar el pago de las publicaciones devueltas antes de ser facturadas. Es lo que hacen, por ejemplo, SGEL y MARINA BCN, aunque con métodos y resultados diferentes. Mientras SGEL mata cada semana las publicaciones entregadas y devueltas (luego cobrará o pagará cada una según marque su vencimiento), MARINA BCN sólo factura los albaranes que vencen en la semana y paga las devoluciones de las publicaciones que ya haya cobrado; no hay problema con los albaranes de entrega, aunque más de una devolución acabe en el departamento de objetos perdidos.
SADIBARNA ha rizado el rizo e implementa el sistema APZ para entregas y devoluciones. Es decir que un albarán de entrega se pagará en uno o varios plazos y, donde dice “fecha de vencimiento”, quiere decir “fecha del primer plazo”; y donde dice “importe total”, quiere decir “importe del primer plazo”. Ahí está el truco. Cuando recibamos la factura del 5 de febrero, vendrá incluido el albarán de la muestra con un valor de 60,96€, pero seguiremos debiendo 33,35€ que corresponde a las publicaciones aplazadas y que se facturarán el 12 de febrero. ¿Cómo puede usted saber el importe total del albarán? Fácil, eche mano a la calculadora.

Me pregunto si será legal emitir un albarán en tales condiciones, un albarán que puede inducir a engaño al cliente que lo recibe.

Respecto a las devoluciones, se sigue idéntico sistema: usted, quiosquero, envía unas publicaciones en devolución y en la próxima factura encontrará una serie de líneas con el ya consabido APZ. Si usted se limita a puntear las cantidades como ha hecho hasta ahora… ¡error! Las líneas APZ no están sumadas en el total y, por tanto, debe conservar los albaranes para comprobar que se las pagan en la factura que se emita en la misma fecha que acompaña al APZ.

¿Cómo se facturan los aplazados?

En la hoja donde se imprimen los albaranes facturados (REP0000000 y COM0000000), aparece un nuevo tipo: el APZ0000000. Este albarán es el sumatorio de todas las líneas de entrega aplazadas y todas las devoluciones igualmente aplazadas.

El detalle de tales líneas se sirve en una o dos hojas que van al final de la factura.

¿Qué no os habéis enterado? Yo tampoco, pero va así. Mientras encuentro en tiempo necesario para describir el método de seguimiento, marcad en los albaranes de entrega o devolución cada una de las líneas facturadas y guardad el albarán hasta que estén tachadas todas las publicaciones. O apuntad en una libreta las líneas aplazadas y comprobad que os las facturan.
Para quienes usan Kiosnet, una aclaración: los albaranes electrónicos descargados llevan señaladas las líneas con aplazamiento pero no actualizan el archivo de líneas pendientes. Hay que entrar en el albarán y hacer una falsa modificación de cada línea para que después se puedan incorporar al albarán APZ. El programa no permite traspasar a pendientes las líneas de devolución que estén aplazadas.

¡Isidrooo! ¡Échame una mano, primo!

(Estoy trabajando con una copia casera de Kiosnet, es decir, antigua, y quizá Cyberpoint haya resuelto la problemática a la vez que la creaba. Quizá.)

viernes, febrero 04, 2011

Tarde de toros

Soy tan poco amante de los animales que, si no tenemos en cuenta al mejor amigo del hombre, sólo me gusta la elegancia del caballo de pura raza, preferentemente andaluza, y la estampa del toro de lidia. Yo sería un asiduo de las corridas de rejones si no hubiese sangre por medio; habiendo sangre, he estado cuatro veces en una plaza de toros y una de ellas fue para ver a Torrebruno. Pero, en ocasiones, hay compromisos ineludibles y ayer me vi obligado a asistir a una corrida. Ésta es la crónica.


Monumental de L'Hospitalet. Toros de la ganadería de Publio de los Píos para el Niño de la Muesca, Miguelín y Gitanillo de Arimana. Como mandan los cánones taurinos, el paseíllo se inició a las 10 en punto de la tarde (10 am, o sea A Mediatarde). Y empezó mal: uno de los alguacilillos se lesionó y hubo de ser retirado con la ayuda de los monosabios.

Al primero de la tarde, un toro negro bragado meano, de nombre “Atontao”, lo recibió en los medios el Niño de la Muesca. De grana y oro. Intentó fijarlo pero el bicho salía suelto; aun así, pudo sacarle unas chicuelinas que avalan la clase del maestro. En el tercio de varas, el animal rehuía al caballo; el Niño de la Muesca pidió el cambio de tercio y brindó la muerte del toro a los espectadores de sombra. Con la muleta estuvo aseado, marcando los tiempos, pero como el toro no colaboraba, acabó haciendo una faena de aliño, rematada con un afarolao. Cuadró al animal con unos pases de castigo y entro a matar sin convicción; como si quisiera perdonarle la vida al bicho. Pinchazo hondo y descabello. Palmas y algunos pitos.

Miguelín, de verde y oro, recibió a “Despistao”, negro zahíno, con una serie de verónicas. Sin excederse; lo justo para acercarlo al caballo y marcar una pica, con lo que pidió el cambio. El público pidió que las banderillas las pusiera el maestro. Citó desde los medios hasta fijar la atención del bicho, que arrancó sin que se moviera el torero; un quiebro en el último instante y dejó un magnífico par, que adornó correteando por delante del toro. Desde el centro de la plaza, brindó al público. Con la muleta toreó al límite que le permiten las ordenanzas: pases de rodillas, naturales, sobrenaturales, de pecho, de espalda… Hasta deleitó al respetable con el número de teléfono. Estocada y descabello. Ovación.

En el que cierra plaza, Gitanillo de Arimana, totalmente de blanco, parecía como si no estuviera. El morlaco, de nombre “Yyoaquiquehago”, cárdeno y bizco de un cuerno, derrotaba por la izquierda. Gitanillo templó y dejó que sus peones lo llevaran al caballo. Incluso aquí cedió a Miguelín el honor de tantear al toro tras la pica. El público empezó a impacientarse. Entonces se acercó al tendido 201, al sol, y brindó a sus incondicionales. Faena corta pero intensa: un par de manoletinas, un molinete y una serie de naturales, rematada por un gran pase de pecho. Citó al volapié y dejó una estocada hasta la cruz en todo lo alto. Cerrada ovación mientras el público, puesto en pie, gritaba ¡Torero, torero!
Salió, junto a Miguelín, por la puerta grande.

Una buena tarde de toros. Sólo falta que el presidente determine a quién le concede las orejas y a quienes les corta el rabo.